Plantas de exterior resistentes para jardín.
Si tienes que elegir plantas de exterior, para tu jardín o terraza, que sean muy resistentes y que necesiten poco mantenimiento, aquí te mostramos las menos exigentes y las más agradecidas.
Nº 1: BUGAMVILLA.
Planta trepadora, puede vivir directamente en el suelo o en maceta.
Si elegimos suelo, tener en cuenta que puede desarrollarse hasta 10 o 12 metros altura, por tanto es necesario ubicarla en la parte del jardín donde no estorbe y donde pueda apoyarse y crecer, ideal para cubrir muros, pérgolas, paredes, etc.
La buganvilla no necesita un suelo rico en nutrientes, ni tiene necesidad de mucho agua, durante el verano bastara con un par de riegos semanales y en invierno solo con el agua de lluvia, eso sí, tener en cuenta que las heladas la perjudican y mojar sus hojas durante el riego también, el riego será solamente hidratar las raíces.
Y lo más importante, la luz, cuanto más tiempo reciba luz mejor será para el desarrollo de esta especie y para nosotros disfrutar de sus colores.
N2: TECOMARIA.
La Tecomaria Capensis es un arbusto trepador de crecimiento rápido que alcanza aproximadamente 3 metro de alto.
Se puede utilizar como ejemplar aislado ayudándole con soportes guías o como trepadora cubriendo pérgolas y muros.
La ubicación ideal sería a pleno sol, pero también se puede desarrollar en semisombra. No toleran las heladas ni los suelos alcalinos.
Se adapta fácilmente siempre y cuando el suelo este bien drenado, necesita pocos cuidados, teniendo en cuenta que su riego siempre será moderado.
N 3: JAZMIN CHINO
Esta planta trepadora es ideal en maceta con una guía tutor o en exterior dando color a pérgolas, celosías, troncos de árboles, paredes etc.
Produce flores pequeñas muy olorosas siempre y cuando le de mucha luz y tenga un buen drenaje, pues no tolera el encharcamiento de agua.
Con regar 2 o 3 veces en semana en verano es suficiente.
En resumen, no necesita muchos cuidados aunque si una poda al año para limpiar de ramas, flores y que vuelva a crecer con más fuerza.
Nº 4: GLICINIA.
La glicina es una planta resistente y siempre florecerá mejor en exposición al sol.
Esta planta trepadora aguanta bien las heladas, crecerá en un suelo no muy exigente en sustratos pero si bien drenado y con riegos frecuentes, no encharcados, manteniendo la humedad.
Es una maravillosa enredadera, puede trepar acualquier lugar, llega a medir hasta 15 metros de altura y es así como puede cubrir:
- fachadas con sus enormes racimos de flores colgantes.
- pérgolas.
- muros.
- rejas.
- cenadores.
- pasillos de paseo.
Solo debes facilitarle un lugar firme por donde trepar.
Curiosamente la glicinia es capaz de vivir hasta los cien años.
Nº 5: CALLISTEMON.
Arbusto de crecimiento medio poco más de metro y medio de altura.
La floración es abundante durante la primavera y verano, están formadas por tallos agrupados en una espiga.
Es sensible a las heladas prolongadas, vive bien en suelos ácidos y tolera bien la sequia, hay que darle un buen drenaje pues no gusta de terrenos muy húmedos, por tanto, el riego será moderado.
Es una de las plantas más interesantes del jardín, ya que puede florecer varias veces al año y dada su coloración intensa es muy apreciado en jardines.
Nº 6: AGAPANTO.
Es una especie muy utilizada en la jardinería, su mejor momento es final de primavera comienzos de verano, aunque el resto del año permanece verde y con abundante follaje, por esto es tan preciado a la hora de decorar un rincón especial, los laterales de caminos o incluso jardineras.
Muy fácil de ser cuidada, el Agapanto crece bien en condiciones de sol o de semisombra siempre que esté bien drenado y el riego sea regular, aumentando en épocas de floración y disminuyendo la humedad en invierno. Es resistente al frio.
Nº 7: LIRIO AZUL.
Tanto si se cultiva en el suelo como en maceta, el lirio es muy fácil de cuidar.
Florece desde primavera hasta verano, de crecimiento muy rápido, pero no descontrolado, es decir, que podemos controlar su expansión no se considera especie invasora.
Vive a pleno sol y en semisombra, nunca en la sombra pues no florecería o seria floración escasa.
El riego seria una o dos veces por semana evitando encharcamientos, en caso de tener en maceta retirar el plato que colocamos debajo de estas a los diez minutos del regado.
El lirio es muy resistente al frio y a las heladas por tanto puede estar en el exterior todo el año.
Nº 8: HEMEROCALLIS.
Son de tipo perenne, producen una gran cantidad de flores y por lo general son en forma de trompeta. Crecen en una amplia gama de suelos y situaciones. Florecen durante los meses de mayo y agosto.
Las flores son de corta duración, cada planta produce una gran cantidad por lo que podremos disfrutar de ellas varias semanas.
Son muy útiles y vistosas en el jardín, ya que podemos darle usos muy variados:
- laterales en senderos.
- camas decorativas.
- centros en contenedores ornamentales.
- cubiertas de suelo.
- sembrándola con otras plantas ornamentales o arbustos pequeños iluminan el paisaje y dan un toque de color muy característico.
El lugar más adecuado para esta especie es pleno sol. El suelo húmedo pero bien drenado y siempre el riego en raíces nunca en flores ni brotes.
Nº9: DURILLO.
El durillo es un arbusto de gran dureza, que aguanta el frío y el calor, el sol o la sombra, permaneciendo siempre verde. Suele florecer en invierno, una de las especies que se atreve a plantar cara al frio.
Es un arbusto alto, consigue alcanzar más de tres metros de altura incluso puedes darle porte de árbol.
Se puede cultivar con facilidad tanto en el jardín como en maceta, pero siempre en el exterior, podemos encontrarle como arbusto aislado o como seto medio o alto
En cuanto al suelo tampoco es muy exigente, el riego deberá ser moderado. Tolera mejor la sequía que el exceso de agua. En invierno, plantado en el jardín, apenas será necesario.
Nº 10: ESPINO DE FUEGO.
Arbusto de hoja perenne, normalmente de 1 ó 2 m de altura, pero puede crecer hasta 4 metros.
Florece a final de primavera y comienzo de verano. Abundantes bayas en otoño que nacen en las ramas maduras, las bayas pueden ser rojas, naranjas o amarillas.
Durante el otoño y aún en invierno, sus frutos aportan una nota de colorido a los espacios verdes.
Podemos cultivarlo como arbusto de pared o para formación de setos libres, nunca geométricos.
Viven a pleno sol y en semisombra y aguantan bien las épocas de sequia pues el riego tiene que ser escaso y muy bien drenado el suelo.
Nº 11: CONTONEASTER.
Alcanza una altura comprendida entre los 0,5 y los 5 metros. El fruto es un pomo redondeado con un diámetro de 5 a 10mm, de color rojo brillante y en cuyo interior tiene de una a cinco semillas.
Es importante que esté en el exterior, en semisombra, aunque también podría vivir a pleno sol pero en climas cálidos.
Soporta bien heladas de hasta los -15 grados centígrados.
Se utiliza como planta ornamental. En maceta se puede tener para decorar terrazas, patios y balcones y en el jardín, en suelo, con riego moderado, dos veces a la semana en verano y una cada 6 – 7 días en invierno, podemos utilizarlo como arbusto aislado o hacer setos bajos o medianos.
Nº 12: PHOTINIA.
Arbustos de hoja perenne, de crecimiento rápido, superan el metro y medio. Especie muy exitosa, debido a sus excelentes cualidades para realizar setos de crecimiento rápido. Su cualidad más espectacular son sus hojas brillantes, de color verde en el invierno, rojo intenso en primavera y rojo vinoso en el verano, dando color a cualquier lugar donde se encuentre.
Como mejor prosperan estas plantas es a pleno sol, así obtendrán las coloraciones más intensas en sus hojas y la planta estará más sana.
En caso de encontrarse en un clima muy caluroso, podemos a media sombra, para evitar las quemaduras del sol.
En suelos muy secos no se desarrollan adecuadamente, ni tampoco encharcados, lo mejor es darle humedad a las raíces con buen drenaje.
Es un arbusto perfecto para lograr setos de tamaño mediano y grande.
Para setos pequeños, existe otra variedad que crece mucho menos y es más adecuada para setos bajos, PHOTINIA NANA.